Pues sí, llegamos a China y dejamos atrás el calorcillo, las bermudas, las chanclas, las gafas de sol y de repente: botas, gorros, guantes, térmicos, bufandas... Unos -15º C había el día que llegamos a Qingdao... Pero decidimos que nunca más miraríamos la temperatura...
Este país es diferente, sin duda... Una cosa curiosa: llegamos justo para Fin de Año, y a que no sabéis qué?? Han estado las tiendas cerradas algunas durante una semana... Para que luego digan que los chinos nunca cierran...
Todo el follón de la Volvo está en la misma marina en la que se celebraron los Juegos, así que las instalaciones están muy bien y estamos trabajando en la sala de prensa de los JJ.OO. Los chinos son un poco especiales porque no paran de gritar, escupir, empujar... No muy educados para nuestra cultura, pero es lo que hay. Uno de los hándicaps que nos hemos encontrado es que casi nadie habla inglés y es muy dificil entenderse con ellos. Cada vez que coges un taxi tienes que pedirle a los de recepción que te escriban en chino en un papel a dónde quieres ir porque si no es imposible... Pero el problema ya no es que no te entiendo, sino que el lenguaje corporal es también distinto por lo que, por muchos gestos que hagas, tampoco te entienden... En fin, muy divertido...
Llegó el Azul, que ganó la etapa, y aprovechando un hueco de un día ni cortas ni perezosas las chicas de prensa, junto con Javi Plaza (del Negro) decidimos irnos a Pekín. El poco tiempo libre que tenemos hay que aprovecharlo así que María & Eli Corporation buscaron unos vuelos, un hotelito en el que pasar un noche y allá nos fuimos los cuatro: el emperador y sus tres concubinas...
Salimos a las 7.40 de la mañana de Qingdao y a eso de las 9 menos algo aterrizamos en Pekín. Tenemos día y medio para ver la capital y no hay tiempo que perder... ¡Preparados, listos, ya!!!!
Primera parada: LA GRAN MURALLA CHINA
¡Venga, vamos chicas, que pronto acaba la cuestaaaaaaaaaa!
Y como no, tanto esfuerzo nos dejó molidas... Así que vuelta a coger el bus para el centro y a aprovechar el trayecto para echar una cabezadita, que no se pueden perder las buenas costumbres...
La mayor plaza pública del mundo hecha en el corazón de la ciudad muy conocida por la violenta revuelta estudiantil de 1989 contra el régimen comunista... Aquí está la tumba de Mao, el Museo de la Revolución, el Monumento a los Héroes... Y el EMPERADOR ESPAÑOL JAVIER DE LA PLAZA Y SUS CONCUBINAS... Muertas de frío!!!!!!
Seguimos luego hacia los Hutongs, callejones que forman el casco antiguo. Un poco de miedito daban y una zona pobre... Las casas daban un poquito de pena... Allí conocimos a un chino que hablaba un poco de inglés, daba clase de caligrafía china en la universidad, y nos enseñó un poco el barrio y su casa... Y para no ser descorteses le invitamos a un cafecito caliente antes de dirigirnos a otra zona de la que no podría decir el nombre, pero había un lago congelado que hacía una pista de hielo estupenda...
Luego cenita y pronto para cama que al día siguiente había que madrugar para ir a... LA CIUDAD PROHIBIDA...
Al lado de la plaza de Tiannanmen, palacio imperial de las dinastías de Ming y Qing y sede del gobierno chino hasta 1919. 800 edificios, más de 9.000 habitaciones y como todo lo que hacen los chinos: a lo grande... Entablamos charla con un chinito que hablaba inglés y nos hizo de guía por un módico precio.
Y no podíamos irnos sin hacer una ceremonia del té... Aquí se estila mucho, tienen diferentes tipos y los chinos hacen de cualquier cosa una ceremonia... Delicious y muy curioso...
El viaje se acabó pronto. Del té al taxi, del taxi al aeropuerto, de Pekín a Qingdao, y del aeropuerto de Qingdao a la marina, que estaban echando el Azul al agua de nuevo y había que sacar fotos, filmar, escribir comunicado...
Muy intenso y muy interesante... Perdonad que no le saque más chispa al asunto pero mañana es la costera, hay que madrugar y son aquí ya las 12 de la noche pasadas...
Seguimos en contacto... Por cierto: MAMÁ: LLAMA!!!!!!
Bicos, bicos, bicos
P.D.: Una abraçada a los colegas de Canal 9 Santi, Jordi y Pedro... Ya me diréis quién gana la porra de la costera de China...
